Panamá hace un llamado a los migrantes para que eviten estos flujos irregulares a través de las trochas, ríos y territorios selváticos del Darién, donde ponen en riesgo sus propias vidas al intentar cruzar de un país a otro.
Como parte de la operación «Flujos Controlados», el Gobierno de la República de Panamá anunció este lunes la instalación de dos nuevos campamentos humanitarios en las comunidades de Nicanor y Peñitas, en la provincia del Darién.
Estos dos nuevos campamentos, instalados por el Sistema Nacional de Protección Civil, se suman al albergue de Mas Di en Metetí, donde se les brindará atención médica y se les aplicará controles biométricos de seguridad a todos los migrantes irregulares.
El Gobierno de Panamá reafirma su posición de mantener la frontera con Colombia cerrada a los flujos migratorios irregulares que afectan la región, así como el compromiso de seguir tomando todas las medidas sanitarias y de seguridad necesarias para que estos migrantes no representen un riesgo de salud o de seguridad para la población panameña.
Panamá hace un llamado a los migrantes para que eviten estos flujos irregulares a través de las trochas, ríos y territorios selváticos del Darién, donde ponen en riesgo sus propias vidas al intentar cruzar de un país a otro.
El Servicio Nacional de Migración (SNM), le informa a la ciudadanía en general que debido a los trabajos de construcción de la futura área de patios y talleres de la Línea Uno del Metro de Panamá, el Albergue Masculino que se encontraba localizado próximo al Ministerio de Obras Públicas en el corregimiento de Ancón, ha sido movilizado a unos 500 metros, específicamente al sector de Llanos de Curundú.
Javier Carrillo, director general del SNM, indicó que en el albergue masculino la población existente no representa ningún peligro y mucho menos amenazas para la sana convivencia en el país.
“Cada extranjero retenido por nuestros inspectores o autoridad de seguridad pública obedece estrictamente al incumplimiento de la normas migratorias contempladas en el Decreto Ley Nº3 de 22 de febrero de 2008, reglamentado por el Decreto Nº 320 de 8 de agosto del mismo año”, apuntó Carrillo.
Los extranjeros que se encuentran en el albergue masculino están retenidos por encontrarse en el territorio nacional de manera ilegal, no por haber cometido algún delito o faltas administrativas.
El albergue masculino cuenta con las condiciones necesarias para que los extranjeros retenidos puedan permanecer un tiempo perentorio, mientras la Institución realiza los trámites necesarios para la debida deportación a su país de origen, respetando en todo momento los derechos humanos de cada ciudadano.
La institución migratoria, registra, fiscaliza y presta un servicio a los extranjeros, velando por el control efectivo de su estadía en el país, dentro de los límites que establece el Decreto Ley Nº3 de 22 de febrero de 2008.